jueves, 29 de julio de 2010

El uso del catalán desciende pese a la lluvia de millones de la Generalitat


Pese a la lluvia de millones invertida por la Generalitat para fomentar el conocimiento y uso del catalán -casi 200 millones de euros en los últimos siete años-, sólo el 35% de los ciudadanos de Cataluña utiliza habitualmente esta lengua de forma preferente, porcentaje que representa casi un 11% menos que en 2003.
Ese dato inapelable, que figura en el último Balanç de Política Lingüística del Ejecutivo autonómico, fue silenciado el pasado lunes durante la presentación del informe por el vicepresidente del tripartito, Josep Lluis Carod-Rovira, que prefirió destacar la supuesta "internacionalización real" del catalán, que ya se enseña, aseguró, en más universidades que el holandés o el griego clásico.
El Balance de Política Lingüística 2004-2010 incluye una encuesta con 7.140 entrevistas a ciudadanos mayores de 15 años encargada por la Secretaría de Política Lingüística de la Generalitat, un departamento directamente controlado por Carod-Rovira, número dos del Ejecutivo que preside José Montilla. Los resultados del sondeo suponen un verdadero jarro de agua fría para el nacionalismo, que ha hecho de la lengua un arma de confrontación política.
Si en 2003, cuando se elaboró la anterior encuesta de usos lingüísticos, el 46% de los ciudadanos confesaba que utilizaba el catalán como lengua habitual, ahora ese porcentaje ha caído hasta el 35,6%. El castellano, que era empleado entonces por el 47,2% de los catalanes como primera lengua, cae ahora levemente hasta el 45,9%. Ese descenso en picado del catalán y la ligera caída del castellano se explican, en parte, por el notable incremento del bilingüismo: quienes aseguran usar ambas lenguas, indistintamente, son ahora el 12% de la población, frente al 4,7% de hace siete años.
Castellano, árabe y "otras lenguas"
Pero no es ésa la única razón que justifica la pérdida de peso del catalán. La llegada masiva de inmigrantes en la última década, especialmente del norte de África y de países de habla hispana, ha desequilibrado la balanza en favor del castellano. El porcentaje de inmigrantes en Cataluña rebasa ya el 17% de la población, lo que explica que casi el 2% de los encuestados por la Generalitat asegura que su lengua habitual es el árabe -sólo un 0,2% en 2003-, y un 4,6% confiesa que utiliza "otras lenguas" distintas al catalán, el castellano y el árabe, frente a un 1,8% que señalaba esta opción en 2003.
Esa pérdida de fuelle del catalán contrasta con el ingente esfuerzo económico de la Generalitat para fomentar su uso. El informe encargado por el vicepresident Carod-Rovira revela que la Secretaría de Política Lingüística ha gastado 192,7 millones de euros en los últimos siete años, y que en 2010 el presupuesto es de 30,7 millones: un 6% más que en 2009, pese a la crisis económica. La parte del león de ese presupuesto -más del 70%- se la lleva el Consorcio para la Normalización Lingüística, un organismo cuyo principal objetivo es la asimilación lingüística de los inmigrantes mediante cursos de catalán impartidos gratuitamente.

El Confidencial