jueves, 2 de agosto de 2012

La policía local sanciona a cinco turistas que atraparon más de 200 erizos de mar


Andraitx: Los vecinos llamaron a los agentes al observar que un grupo de bañistas se estaba comiendo los animales vivos junto a las rocas de Cala Conills





LORENZO GUTIÉRREZ (Texto y Foto)
 La Policía Local de Andratx ha abierto un expediente sancionador a un grupo de turistas que pescó más de 200 erizos de mar. La denuncia ha sido remitida ahora a la conselleria de Agricultura y Medio Ambiente del Govern, que decidirá si multa a los cinco visitantes por este hecho.

El pasado martes a mediodía cinco visitantes que estaban en Sant Elm, todos ellos de nacionalidad francesa, decidieron dedicar la mañana a atrapar erizos de mar con una trampa. Recogieron más de dos centenares, según los agentes de la autoridad de
Andratx. Tras la caza, se sentaron junto a las rocas de Cala Conills. Con una caja y unas planchas que les sirvieron de mesa, improvisaron un banquete y estuvieron comiéndose algunos de los equinoideos vivos. Este animal es un elemento muy preciado en la gastronomía francesa.

Los vecinos de la zona reprendieron a los turistas y les indicaron que era una actividad prohibida. Molestos por esos comentarios, el grupo de franceses replicó de malas formas, según relatan los locales, y les dijeron que no era la primera vez que los cazaban. Los vecinos optaron entonces por llamar a la Policía Local de Andratx, que se sorprendió ante tamaña captura.

Protegidos por ley

Los agentes requirieron la presencia de un técnico municipal de Medio Ambiente, quien certificó cuántos erizos de mar habían cogido y devolvió al mar todos los que no se habían comido.
La Policía Local informó a los turistas, de que uno es residente en el municipio de Andratx, que desde el pasado mes de junio es una actividad prohibida, ya que los equinoideos están protegidos de forma especial durante los meses de cría (entre abril y octubre). Tras liberar los animales, los agentes procedieron a incoar un expediente sancionar que ahora tendrá que resolver la Conselleria y decidir si la actuación de los turistas merece una sanción económica.