jueves, 17 de octubre de 2013

Campaña de extorsión: La web que difundió el ‘impuesto revolucionario’ para los huelguistas es de un investigador de la UIB

Un grupo de catedráticos de la UIB se une a las protestas contra el TIL en la UIB. | J.A.
La plataforma que ha dado voz a la campaña de extorsión dirigida a empresarios de las Islas que no apoyan económicamente la huelga está gestionada por el investigador de la Universitat de les Illes Balears (UIB) Arnau Matas. Su portal web Contrainfo.cat difundió la iniciativa del autodenominado Sindicato de Precarios que consistía en crear listas negras de establecimientos que se negaran a donar el 1% de sus ganancias del mes de octubre a la caja de resistencia de los investigadores huelguistas.
La noticia del día 1 de octubre remitía a un muro de Facebook que en pocas horas se llenó de nombres de comercios con "ideologías contrarias". El objetivo era que nadie consumiera en estos negocios y señalarlos para que el vecindario supiera "qué tipo de personas eran".
La campaña de desprestigio circuló por las redes sociales durante ocho días bajo el paraguas de contrainfo.cat, pese a que nadie sabía quién estaba detrás de este grupo. El Sindicato de
Precarios actuaba en nombre de la Assemblea de Docents y bajo el logotipo de la Plataforma Crida, pero ambas asociaciones se desvincularon de esta iniciativa en declaraciones a este rotativo siete días más tarde. "Las donaciones han de ser siempre voluntarias", explicitó Crida mientras que la Assemblea se desvinculó porque "no concuerdan con el espíritu" de este colectivo.
Eso sí, fue a raíz de la publicación el día 8 de octubre en EL MUNDO/El Día de Baleares cuando ambos emitieron un comunicado para ratificar su independencia aunque no denunciaron las prácticas. Al malestar de los profesores se sumaron las denuncias de los empresarios afectados a la Policía, lo que provocó el cierre inmediato del muro de Facebook donde del Sindicato de Precarios creaba las listas negras.
Ajeno a la polémica y lejos de condenar la extorsión, el administrador de contrainfo.cat defendió ese mismo día la 'relevancia' de la iniciativa, equiparándola a un inofensivo llamamiento al 'consumo responsable'. Y es que para Matas, las campañas de boicot son "una herramienta de lucha básica".
La noticia sigue publicada en la web pero no sus comentarios, que han sido censurados después de que los lectores criticaran la iniciativa e, incluso, acusaran a sus precursores de "nazis catalanistas" por querer cobrar "impuestos revolucionarios" y llevar a cabo prácticas propias de la banda terrorista ETA. Para contrainfo.cat son "insultos tan ridículos que no podemos evitar sonreír".
En una nueva entrada titulada "Nazis, catalanistas e impuestos revolucionarios: un malentendido surrealista sobre el Sindicato de Precarios", el administrador de Contrainfo.cat aseguró el 8 de octubre que no sabe quién está detrás del Sindicato de Precarios pero que "su nacimiento es una noticia suficientemente relevante como para darle cobertura". Pese a su desconocimiento, defendió activamente la causa: "nace con clara vocación de denunciar prácticas de explotación laboral" y es «un proyecto en positivo».
Contrainfo.cat se define como un medio de comunicación, "un altavoz al servicio de las luchas sociales transformadoras que apuesta 'claramente' por el anticapitalismo y antipatriarcado". Su administrador sólo permite la publicación de contenidos que sean coherentes con los principios y objetivos de la web. Por lo que se deduce que comulga con las prácticas del sospechosamente anónimo Sindicato de Precarios.
De momento, éste sólo se ha pronunciado a través del portal web. Al pie de la noticia, en los comentarios, el Sindicato de Precarios pide disculpas a los docentes pero no se retracta de su modus operandi. Dice que no se coaccionó a nadie sino que "simplemente copiaba y pegaba las opiniones de los gerentes de los negocios que se posicionaban abiertamente en contra de los derechos de los trabajadores".
El colectivo reconoce la utilización fraudulenta del logotipo de Criday que "se tomó la libertad" de hablar en nombre de los maestros para dar a conocer la caja de resistencia. Asegura que no sólo se ciñe a boicotear empresas contra el decreto de trilingüismo impulsado por el PP balear sino también a negocios que "amparan actividades de la extrema derecha". Asimismo, cree que el hecho de publicar una lista negra de negocios no es coacción, del mismo modo que no lo son los comentarios negativos que aparecen en Tripadvisor. "La diferencia es que nuestro criterio a la hora de consumir en un negocio no es el precio ni la calidad del servicio sino un modelo que tenemos de sociedad", argumenta y, por último, rechaza que el consumo deba mantenerse al margen de las cuestiones políticas "que nos afectan".
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Información complementaria a la que se alude: 

Presentació del Sindicat de Precaris